jueves, 18 de marzo de 2021

La princesa que salió rana



No me puedo creer lo bobo que ha resultado ser al final mi querido Harry, y que esté enamorado no es excusa. De momento, después de la entrevista con Oprah han quedado claras varias cosas:

  1. Harry odia a los medios de comunicación, pero a Meghan le gustan más que a un tonto un lápiz.
  2. Ninguno de los dos se ha parado a pensar cómo se las gastan los servicios secretos británicos, y hasta aquí puedo leer.
  3. Si pretendían dar lástima, les ha salido el tiro por la culata.
  4. Si pretendían que la prensa les dejara en paz, les han salido dos tiros por la culata y sólo habían metido una bala.


La entrevista en sí, es un documento periodístico digno de una versión cutre de Tele 5.  Empieza con Oprah diciéndole a Meghan “no sabes lo que te voy a preguntar” y aclarando que la parejita feliz no ha cobrado nada por la entrevista; sigue con la duquesa retratándose como una pobre ingenua que no sabía con quién se casaba… pues empezamos bien, como para que todo lo demás resulte creíble.



Meghan Markle debía ser hace unos años la única persona en el planeta que no sabía quién era su guapísimo futuro marido, que no sabía cómo se las gasta la monarquía británica y que jamás oyó hablar de Diana de Gales, ¡pobre Meghan, también es mala suerte! sin embargo en un momento de la entrevista se le escapa que la princesa Eugenia y ella se conocían antes de que ella conociera a Harry… ha jugado a ser la nueva Diana, pero no sé yo si le ha salido bien. Diana se casó con diecinueve años, Meghan con treinta y seis; Diana era virgen, inocente y nunca salió de las faldas de su familia, mientras que Meghan tenía una carrera como actriz, estaba divorciada y llevaba una vida independiente antes de casarse; Diana supo conquistar al pueblo que la adoraba, a Meghan se le empezaron a ir uno detrás de otro los empleados que trabajaban para ella y surgieron los rumores acerca de su mal carácter. Nada que ver la una con la otra, y el escaso talento interpretativo de la duquesa no ha sido suficiente para hacer creíble la comparación.


La pareja se fue de Inglaterra porque estaban agobiados por sus responsabilidades como miembros de la Royal Family y porque la prensa les acosaba; decidieron establecerse en California para llevar una vida tranquila y criar a su hijo Archie en el anonimato y todo el mundo lo entendió, incluso la propia Familia Real. Pero claro, en cuanto les cortan el grifo no se les ha ocurrido nada mejor que llamar a la tipa más hortera de la TV americana, la más chabacana, la más morbosa y la más lerda para que les entreviste, y les dé la ocasión poner a parir a la familia, vamos, lo ideal para que la prensa carroñera te deje en paz. Un plan sin fisuras.



Se puede ser guapo, superguapo, megaguapo, y
Harry de soldado

La estrella de la entrevista es sin duda Meghan, Harry sólo aparece de adorno (un adorno bien bonito, eso sí) y Meghan se pregunta “cómo pensaban que a estas alturas íbamos a estar callados”… ¡¡¡PUES PORQUE PENSABAN QUE TENÍAIS CEREBRO, PAR DE BOBOS!!! joer, que Diana acabó como acabó por mucho menos que eso… a continuación “es que a Archie no le dieron un título” y claro, cuando se da cuenta intenta enmendarlo “bueno, lo del título es lo de menos, pero tiene que estar seguro”. Vamos a ver, duquesita, ninguno de los bisnietos de la Reina tiene un título excepto los hijos del heredero, ésas cosas se hacen por protocolo. Es más, deberías recordar que la princesa Ana renunció a que sus hijos llevaran ese título que tanto añoras para Archie porque ella, al contrario que tú, conoce los privilegios pero también lo que conllevan, y sabía que a sus hijos les iría mejor si buscaban un trabajo para vivir y no tenían título. De hecho sus dos hijos, nietos de su graciosa Majestad igual que Harry, trabajan para ganarse la vida y no les pasa nada. En cuanto a la seguridad tres cuartos de lo mismo, a costa del contribuyente sólo se proporciona escolta a los miembro de la familia real que realizan funciones oficiales, la escolta viene con el trabajo y si dejas el trabajo no hay escolta.  



La pobre Meghan tuvo pensamientos suicidas. A ver, con eso poca broma, por supuesto que hay que tomarse muy en serio a cualquiera que tenga esos pensamientos y se lo cuente a la familia, a su mejor amigo o preferentemente a un médico que pueda tratarle. Pero claro, si lo que haces es ir a contárselo a Oprah… pues chica, qué quieres que te diga. Según ella lo que pasó es que le impidieron buscar ayuda médica porque perjudicaría la imagen de la Institución, de nuevo una excusa que no se ha creído nadie. La familia real tiene médico propio acostumbrado a la discreción total y absoluta, nadie se va a enterar si a Meghan la tratan por una depresión o por un sarpullido. Además tanto Harry como Kate y Guille son patronos de asociaciones que defienden normalizar la enfermedad mental, todos los años hacen campaña al respecto y el propio Harry ha reconocido que necesitó ayuda médica después de morir su madre, y por supuesto le fue proporcionada como debe ser y como haría cualquier familia. Hacernos creer que a la Reina le daba igual si Meghan se suicidaba, pues no cuela, querida, no cuela, y adobado con lágrimas de cocodrilo, todavía cuela menos.



Y claro está, la ex actriz reconvertida en duquesa plañidera, no iba a dejar pasar la oportunidad de usar el comodín del racismo, que es tan útil para crear morbo y hacer exclamar a la presentadora un “WHAT???” más falso que Judas. De verdad, si la Familia Real británica fuera mínimamente racista, sólo un poquito, esta pareja no se habrían casado, la familia tiene poder de sobra para impedirlo ¡coño, si hicieron dimitir al tío bisabuelo de Harry y era el Rey! sigue sin colar, Meghan, es más, en cuanto los BLM y SOS Racismo te ladren que no eres lo bastante negra para quejarte, y no van a tardar mucho, sabrás de verdad lo que es el racismo.


Es que resulta que alguien mostró preocupación, o curiosidad ("to be concerned" puede ser ambas cosas) por cuan oscuro sería el color de la piel de Archie antes de que la criatura naciera. Y digo yo, ¿hay alguien que no sintiera curiosidad por saber cómo sería el retoño de una famosísima pareja formada por una mulata y un pelirrojo? porque yo tenía mucha curiosidad, mi apuesta era negro clarito con pelazo color zanahoria. Acerté sólo a medias.


Los duques con su hijo Archie

“El primer miembro de color de la Familia Real no será príncipe, no tienen derecho a arrebatarnos el título”, ¿de color? ¿de qué color? ¡¡¡Archie es blanco, míralo bien!!! lo de esta mujer con el título es increíble, por más que siga poniendo la excusa de que su preocupación es la seguridad de su hijo. También apunta nuestra heroína que fue criada como una niña de color, como si eso supusiera alguna distinción en una familia de clase media-alta como la suya. 


Entre queja y queja, racismo y protocolo, Oprah intercala unas bonitas imágenes de Harry y Meghan en la nueva mansión que se han comprado, y que deben financiar ahora con el generoso estipendio que reciban por esta entrevista-puñalada. Podemos observar sus jardines, su huerto y el corral donde crían a las gallinas a la vez que escuchamos unas bonitas palabras de Meghan, “las rescaté de un matadero, me encanta rescatar animales”. Lo primero que me ha venido a la cabeza son las palabras de Meghan cuando nos contó que la noche en que Harry le pidió matrimonio, estaban asando pollo para cenar. Si rescatas el pollo de un matadero ¿te sale gratis? ¿se puede ser tan tacaño siendo miembro de la realeza?


Tanto Meghan como Oprah se quejan constantemente de la prensa, de la persecución de la prensa, de las mentiras de la prensa… en serio, ¿qué sois vosotras dos? ¿qué ha dicho de ti la prensa, Meghan, que no haya dicho Oprah en su programa a todas horas de todo el mundo? las dos estáis ganando una fortuna a costa de la prensa carroñera, y no está bien morder la mano que te da de comer.


Sale a relucir el asunto aquel de que Meghan hizo llorar a Kate y resulta que según ella fue al revés, un malentendido acerca del vestido de las damas de honor de la boda, Kate hirió sus sentimientos y le hubiera gustado que la familia saliera a explicar lo que realmente pasó, de nuevo Megan se sintió abandonada y desprotegida. Porque claro, lo que ella esperaba es que saliera la Reina a dar un comunicado oficial, en el que explicara  muy clarito quién de entre las dos duquesas había hecho llorar a quien, di que sí, reina. Digo, duquesa.


A Meghan se le escapa “he sido actriz, novia, duquesa, princesa, madre”, estoooooo ¿princesa? tú nunca has sido princesa, querida, entre este lapsus y el título de Archie a ver si vas a estar reconociendo que lo que de verdad te fastidia es no haberte casado con el heredero sino con su hermano, yo ya no sé qué pensar.


Cuando sale a escena Harry, es el único en decir “no nos quejamos, ahora llevamos una vida muy buena”, pero lo hace después de quejarse de que la familia real les dejó de pagar hace meses. Y Oprah no dijo “WHAAAT!!!” ni nada, pero lo dije yo en casa en un arranque de histrionismo oprahniano. A ver, normal que te dejaran de pagar, será porque dejaste el trabajo ¿no? este Harry… muy guapo pero luces, poquitas.


En fin, Meghan y Harry, que vosotros estaréis encantados con el pastón que estáis ganando, pero habéis metido la pata hasta la oreja, y a vuestros hijos les habéis hecho la putada del siglo, no van a poder los pobres ni respirar en paz. Pagadles un guardaespaldas de vuestro bolsillo y que sea bueno, les va a hacer falta.