jueves, 31 de mayo de 2012

No seamos tontas

http://www.lavanguardia.com/salud/20120530/54301125629/mujeres-objetivo-tabaqueras.html





No nos dejemos engañar. Que no, que fumar no es de guays, ni te hace más mujer, ni vas a tener más amigos, ni a gustar más a quien te gusta, ni a estar más a la moda, ni nada de nada de nada, rien de rien. Que lo único que vas a conseguir es gastarte un pastón y envenenarte poco a poco. Ahora parece ser que los angelitos del márketing de las tabacaleras se han decidido por el tercer mundo ¡y por las mujeres! de todos los mundos. Claro, deben pensar que como somos mujeres somos idiotas, manda güevos tantos años peleando por la igualdad... aunque muy a mi pesar tengo que reconocer que a veces imitamos a los hombres en lo peor. No se trata de quitarles sus derechos, sino de reconocer los nuestros; no se trata de que ellos cobren menos por el mismo trabajo, sino de que nosotras cobremos igual, etc... y por supuesto no se trata de que nosotras fumemos como carreteras para ser igual que ellos, sino de que ellos y nosotras dejemos de una vez esa maldita drogadicción que mata al que fuma y al que está al lado.


Y no, no me vale argumentar que el tabaco da de comer a muchas personas: dueños y trabajadores de plantaciones, estanqueros, trabajadores de tabacaleras... esa gente por mucha crisis que haya siempre puede ganarse la vida de otra manera, y quien muere de cáncer por culpa del fumeteo ya no puede ganarse la vida PORQUE LA HA PERDIDO. Vamos, es como defender el consumo de heroína porque si no, los pobrecitos traficantes irían a la cola del paro ¡VENGA YA!

En realidad no me vale ningún argumento para defender el consumo de tabaco. La ley Antitabaco lleva ya implantada en España año y medio y la hostelería sigue tan campante; inhalar humo no da ningún placer, si lo piensas es bastante repugnante, ¿quién metería la nariz en un tubo de escape?; el tabaco no quita la ansiedad ni calma los nervios, sólo te quita la ansiedad y te calma los nervios QUE ÉL MISMO te ha producido previamente, ¿conoces a algún no fumador que necesite encender un cigarro para calmar su ansiedad? Y evidentemente todos podemos tener ansiedad por miles de motivos, pero los no fumadores no necesitamos un cigarrillo para eliminarla. La única razón para consumir tabaco es haberse convertido en un drogadicto. Lamento que muchos fumadores se sientan ofendidos con esa palabra, aunque la mayoría lo reconocen sin problemas, pero es la única que hay para definir la adicción a una droga y el cigarrillo es una droga, tan adictiva como la heroína y en algunos aspectos más peligrosa, porque todavía sigue teniendo para determinada gente, aceptación social.

Y nos faltaban las tabacaleras. Se ve que no tenemos bastante con los diseñadores de ropa y sus tallas “36 es de gordas”, ni los vendedores de cosméticos y sus “a los 25 ponte crema antiarrugas porque ya eres vieja”, ni los de cirugía estética “a ningún hombre le gustan unos pechos más pequeños que una 110”. No, ahora faltaban los de las tabacaleras en plan “no hagas caso a nadie, mujer, tómate un chupito de cianuro, arsénico, butano, amoníaco, polonio y metano y serás encantadora. O mejor, tómate veinte al día al ridículo precio de 120 euros al mes, te comerás el mundo y sin engordar”. Porque al fin y al cabo un cigarrillo no es más que eso, obviando las casi 4000 sustancias venenosas más que me dejo y de las que también está compuesto. ¿Qué va a ser lo siguiente? ¿que nos tiremos por un puente dejándoles nuestra herencia directamente, para evitarnos el sufrimiento del cáncer y a ellos la pasta en publicidad?

No te dejes engañar, por más que lo digan las tabacaleras no eres tonta por ser mujer.

Si no lo has probado nunca, no lo hagas. No necesitas descubrir su sabor, al igual que no necesitas descubrir el sabor de una caca de perro ¿para qué?
Si lo has probado y no te has enganchado, no vuelvas a fumar nunca. Como te digo es una droga peligrosa, mucho más de lo que creemos y el siguiente cigarrillo puede ser el que te enganche, no te la juegues: se trata de tu salud, de tu economía y de tu vida, las tres son mucho más importantes que un simple cigarrillo.
Si te has enganchado, déjalo lo antes posible; si no puedes tú sola, pide ayuda; si lo intentaste varias veces sin resultado, no te desanimes, el próximo intento puede ser el definitivo. No lo dudes, tu cuerpo y tu autoestima lo agradecerán.


Y en cuanto a los tabacaleros y demás publicistas empeñados en hacernos como ellos quieren que seamos y en que consumamos lo que ellos quieren que consumamos, encojo mis dedos pulgar, índice, anular y meñique, levanto con garbo mi dedo medio y grito al viento: ¡QUE OS ZURZAN A TODOS! Ya está bien.

1 comentario:

  1. Hola guapa!! Sólo una cosa. ¿Conoces los premios Liebster Blog? Si no los conoces, entra cuando quieras en Bienvenidas a los treinta, porque te han dado uno.

    Besitossss

    ResponderEliminar