sábado, 25 de febrero de 2023

Una vela en la oscuridad (Diario de guerra XXVII)

 COLABORACIÓN DE LINA ZALITOK
(deutsch unter)
(german below)

Si la puerta principal de mi edificio de apartamentos está abierta sin pasar la tarjeta, significa que no hay electricidad. Enciendo la linterna de mi teléfono y subo las escaleras. Abro la puerta y presiono la llave de luz del pasillo. ¡Cierto, no hay luz! Muy bien, cuando vuelva la electricidad lo sabré porque se encenderá la luz del pasillo.


Cuando entré en mi apartamento oscuro, vi la luz de las velas en la sala de estar. Pandino se sentó a la mesa y miró fijamente la vela en la oscuridad.

-“Pandino, pensé que le tenías miedo al fuego... ¿por qué encendiste la vela?"
-“le tengo miedo al fuego, pero quiero superarlo. Y no quería estar aquí sentado a oscuras” – dijo con impaciencia.
-“pensé que te gustaba la oscuridad"
-“y me gusta, pero hoy necesito algo de luz. Ya hay bastante oscuridad en mi corazón y en mi mente”
-“¿qué ha pasado?"
-“nada, como siempre"- dijo Pandino con calma y siguió mirando la vela
-“¿te ha pasado algo triste?"
-“no"
-“¿te has acordado de algo triste?"
-“sí"
“¿el qué?"
-“hace ocho meses que empezó la guerra, y dentro de ocho meses seguro que ella ya se ha ido”
-“¿quién?"
-“la luz de mi vida"
“¡qué patético te pones! ¿te refieres a la hermosa bailarina?
-“de patético nada, es lo que hay. Ocho meses después estoy aquí sin entusiasmo y sin alegría”
-“¿por qué se va? ¿a dónde?”
-“no lo sé, pero ella quería estudiar en una escuela de baile en el extranjero desde hace mucho tiempo. Hace un año la escuché decirlo en una fiesta después de la actuación de su compañía. Estaba charlando con otros bailarines y algunos espectadores con una copa de champán en la mano. ¿No te lo dije? siempre habla tan alto y abiertamente, como si todos fueran sus amigos. Y…” - Pandino no paraba de hablar
-“¡espera un minuto, Pandino! ¿por qué te acordaste ahora de que se iba de Ucrania en ocho meses?”
-“porque miré el calendario. En su momento dijo “a más tardar en otoño de 2023”. Probablemente ya esté empezando a planearlo todo. El año académico comienza en el otoño pero estoy seguro de que le gustaría tomarse el tiempo para buscar un apartamento e instalarse. Así que probablemente se vaya en julio” –dijo con tristeza.
-“¡Pandino, para ya! demasiados pensamientos. Eso realmente no te concierne. Además, todavía no es otoño y ya estás pensando en él. Ya sabías todo eso ¿no? ¿por qué te viene al pensamiento ahora?
-“creía que todavía quedaba mucho tiempo. Pero ver el calendario me asustó. Los meses luminosos están contados. Ocho es menos que diez..."
-“sigue siendo mucho tiempo. Además, puede que salga de Ucrania mucho antes. Después de todo, esto es una guerra y todo puede cambiar en cualquier momento”
-“eso no es tan seguro como que ella planeaba comenzar sus estudios en menos de un año. Todo puede cambiar, pero también todo puede permanecer igual.”- dijo Pandino molesto
-“así que estás triste por algo que sucederá en unos ocho meses, ¿verdad? ¿estás de luto, por así decirlo? es razonable ¿no estás triste por ninguna otra cosa?"
-“no. Dime, si te enteras de que tienes una enfermedad grave y vas a morir en un año más o menos, ¿no te entristeces de inmediato, aunque aún no haya pasado ese último año de tu vida esperando la muerte?
-“sí, pero aquí nadie muere, al menos eso no es seguro (todavía). De acuerdo, ahora hay más formas de morir: misiles, drones, enfermedades, accidentes automovilísticos, quién sabe qué más..."
-“sí, mi entusiasmo y alegría morirán. Dentro de ocho meses ya no seré Pandino”
-“todavía tienes ocho meses para pensar en ella, eso te mantendrá emocionado. Te encanta pensar"
-“me encanta la hermosa bailarina. ¿Quién soy yo sin ella? ella sería esta vela -señaló la vela con su pata- y yo me sentaría en total oscuridad cuando la llevaran a otra habitación, o incluso a un apartamento, o incluso a otro edificio de apartamentos... de hecho, a otro país... ¡Oh, no!” -sus ojos se llenaron de lágrimas
-“¡cuánto patetismo! ¿qué te has tomado esta tarde? ¿no puedes irte con ella?"
-“ella no me necesita. Y tú sí me necesitas aquí, al menos hasta que termine la guerra” -se secó las lágrimas de las mejillas
-“bueno, pero yo quiero que seas feliz. Puedo tratar de vivir sin ti. Podemos telefonearnos”
-“Linotschka, no lo entiendes. En primer lugar, es importante que me quede aquí porque aquí hay una guerra. En segundo lugar, eres importante para mí y yo soy importante para ti. Nada me conecta con la hermosa bailarina excepto mis sentimientos. No puedo renunciar a mi vida y a ti para perseguir un sueño inalcanzable. Además, no tengo nada que hacer si me voy con ella. Incluso si ella lo permitiera no puedo sentarme a su lado y mirarla todo el tiempo. Necesito algo que hacer”
-“pero acabas de decir que tu entusiasmo y alegría morirán y que nunca volverás a ser Pandino si se va. Así que no tienes que renunciar a nada para seguirla. Ella lo es todo para ti”
-“tendría que renunciar a ti"
-“¡lo ves! para que no te quedes sin nada cuando ella se vaya. Te quedas conmigo"
-“correcto. Pero me voy a deprimir. ¿En qué pensaré cuando ya no vea sus pasos de baile ni escuche su risa? en esa situación mi actividad principal, es decir, pensar, pierde su razón de ser”
-“¿tal vez podrías enamorarte de otra bailarina?"
-“¡pero cómo puede ser tan frío tu corazón! no lo habría pensado. Ah, ya puedo sentir las grietas que cubrirán la superficie de mi corazón en ocho meses..."
-“es normal, a veces se te rompe el corazón. Pero de alguna manera continúa vivo. Después de un tiempo ves a un nuevo bailarín o cantante, quién sabe... y ya tienes de nuevo material en el que pensar”
-“o puedo pensar en cómo sufro".
-“eso podría ser peligroso... ¿de verdad quieres estar enamorado en medio de la guerra?"
-“no estamos en medio de una guerra. Todo está relativamente tranquilo aquí”
-“bueno, estamos sentados en la oscuridad. Vale, con velas. Y hace bastante frío… por cierto, hubo algunas alertas aéreas hoy. ¿No te preocupa?"
-“no. Hay cosas peores. Tienes razón, no tengo por qué sufrir. No puedo perder gente en la guerra porque no amo a la gente y nadie me ama"
-“eso no es cierto. ¡Acabas de decir que amabas a la bailarina!"
-“ella no me ama, eso no cuenta. La estoy perdiendo de todos modos, de una forma u otra. Soy solo un espectador. Así que mejor empiezo a sufrir ahora"
-“¿no hay ya bastante sufrimiento a nuestro alrededor?"
-“pero ése no es mi sufrimiento. Tú misma dijiste ayer que no puedes sentir el sufrimiento de los demás, incluso si hablas con ellos personalmente"
-“¡oh! quieres sufrir porque mucha gente está sufriendo en Ucrania, ¿verdad? ¿para no ser distinto a los demás? es raro ser feliz ahora, ¿no?"
-“nunca he sido especialmente feliz pensando. Pero parece que el sufrimiento es más adecuado ahora que nunca. ¿No puedes sentirlo en el aire? ¿en esta oscuridad?" - preguntó Pandino con reproche.
-“al contrario. Pensemos en ello”


-“bueno, ya era hora de que volviera la electricidad. ¿No notas que los pensamientos se vuelven más y más oscuros?” -inspiré y exhalé ruidosamente
-“sí. Mira la vela por favor. Esto ayuda." -dijo Pandino con orgullo
-“¿y si me llevo la vela a otra habitación y te dejo aquí?" -pregunté burlonamente.
-“¡por favor no lo hagas! ¡eres tan despiadada!" -exclamó Pandino
-“puedes quedarte con la vela..."
-“pero no con la hermosa bailarina”
-“me tienes a mí, a Storch y a Cinghiale. Podrías perdernos. Entonces tendrías una verdadera razón para sufrir. No sufras antes de tiempo. Todo llega. Bueno, es posible que con Cinghiale no puedas contar ya que sus puntos de vista políticos son bastante dudosos, por decirlo suavemente..."
-“no estoy seguro de cuánto tiempo más podremos retenerlo… pero de todos modos no vive en Ucrania. Eso hace que tenga menos probabilidades de morir, ¿no?”
-“creo que sí"
-“puedo perderte, Linochka, especialmente porque eres tan distraída y descuidada. Y no estoy preocupado por Storch: puede volar mejor que todos los cohetes y drones. Ningún arma lo alcanza”
-“no soy ni distraída ni descuidada, pero sí, aquí en Ucrania todos jugamos a la lotería con la muerte"
-“¡Linotschka, no exageres!"
-“te lo digo, ha estado oscuro por mucho tiempo... hablando de eso, ¿no crees que es bueno que en ocho meses tu amor esté a salvo y en la luz?"
-“tienes razón -Pandino sonrió de repente- ¡es hermoso! entonces no tengo que preocuparme por ella. Ella también dormirá mejor. A donde va definitivamente no hay alertas aéreas. Seguramente el clima será más cálido y no habrá apagones.” -estaba hablando sin parar otra vez, pero ahora con entusiasmo.
-“¡lo ves! querías que viviera en Warland para poder verla. ¿No fue egoísta?"
-“Sí, es mucho mejor si se va de Ucrania. Yo no estaba al tanto de eso. Me tranquilizará que viva en un lugar más seguro. Aunque no la volveré a ver, es tan hermoso pensar que está bailando y sonriendo en algún lugar del mundo, sin amenazas de nada ni de nadie”
 
De repente hubo luz en el pasillo.
 
“¡Ha vuelto la luz!” -exclamó Pandino con alegría, y saltó de la silla al suelo- “esperemos que la leche no se haya echado a perder. La nevera solo estuvo sin electricidad durante unas dos horas. ¡Ahora puedo lavarme y secar mi pelaje con un secador! ¡así no tendré tanto frío después de la ducha! ¡ay, qué hermoso!"
-“¡espera! ¿y la vela? ¿no quieres apagarla? vamos a necesitar muchas velas. ¡Tenemos que ser frugales! ¡ya llegará el día en que nos sobren las velas!”
-“cierto, lo siento. Hay que ahorrar tanto velas como electricidad. ¡Debemos economizar todo! ¡pronto viviremos de manera muy natural! ¡ya no me sentiré culpable!” –Pandino apagó con entusiasmo la vela y se dispuso a ir al baño
-“¡espera, Pandino! Entonces la vela ya no es tan importante, ¿verdad?” -pregunté seriamente
-“¡hay electricidad! ¿no ves?"
-me refiero a tu amor
-“sí, es importante, pero tengo que darme prisa. ¿Qué pasa si la energía se corta de nuevo?
-“tienes razón. Pero recuerda: las velas son hermosas aunque cuando hay electricidad, no son esenciales para la vida”
-“¿qué quieres decir?"
-“solo quiero decir que tu vida es hermosa incluso sin una hermosa bailarina"
-“no"
-“pero"
-“no"
-“pero"
-“quiero bañarme. ¡Adiós!” -cerró la puerta del baño.




(texto original)

Wenn sich die Eingangstür meines Wohnhauses öffnet, ohne dass ich den Chip darauf lege, heißt es, es gibt keinen Strom. Ich schalte die Taschenlampe auf meinem Handy ein und gehe die Treppe hoch. Ich öffne die Tür und schalte das Licht in der Flur ein. Ach stimmt, es gibt kein Licht! Na gut, das Licht in der Flur wird ein Zeichen sein, dass Strom wieder da ist.
Ich betrat meine dunkle Wohnung und sah Kerzenlicht im Wohnzimmer. Pandino saß am Tisch und guckte aufmerksam auf die Kerze in der Dunkelheit.
„Pandino, ich dachte, du hattest Angst vor Feuer… Warum hast du die Kerze angezündet?“
„Ich habe immer noch Angst vor Feuer, aber ich musste sie überwunden. Ich wollte nicht in der Dunkelheit sitzen.“ – sagte er ungeduldig.
„Ich dachte, du mochtest Dunkelheit.“
„Stimmt, aber heute brauche ich zumindest ein bisschen Licht draußen. In meinem Herz und Kopf ist dunkel genug.“
„Was ist denn passiert?“
„Nichts, wie immer“ – sagte Pandino ruhig und guckte weiter auf die Kerze.
„Hast du etwas Trauriges erfahren?“
„Nein.“
„Ist dir etwas Trauriges, was schon bekannt ist, bewusst geworden?“
„Ja“
„Was denn?“
„Der Krieg dauert schon acht Monate und in acht Monaten geht sie weg.“
„Wer?“
„Das Licht meines Lebens“
„Wie pathetisch! Meinst du die wunderschöne Tänzerin?“
„Kein Pathos. Es ist die Tatsache. In acht Monaten bleibe ich ohne Begeisterung und Freude hier zurück.“
„Wieso geht sie weg? Wohin?“
„Ich weiß es nicht, aber sie wollte seit langem an einer Tanzschule im Ausland studieren. Vor einem Jahr habe ich dies bei einer Party nach der Aufführung ihrer Truppe gehört. Sie redete mit anderen Tänzern und ein paar anderen Zuschauern mit einem Glas Sekt in der Hand. Habe ich dir nicht erzählt? Sie redet ja immer so laut und offen, als ob alle ihre Freunde wären. Und…” - redete Pandino wie ein Wasserfall, ohne Pausen zu machen.
“Moment, ruhig, Pandino! Wie hast du denn jetzt erfahren, dass sie in acht Monaten die Ukraine verlässt? Du warst ja zu Hause.”
“Ich habe auf den Kalender geschaut. Sie sagte damals “spätestens im Herbst 2023”. Sie beginnt wahrscheinlich schon alles zu planen. Das Studienjahr beginnt ja im Herbst, aber sie möchte sich bestimmt noch Zeit nehmen, um eine Wohnung zu suchen und anzukommen. Also fährt sie wahrscheinlich schon im Juli weg.“ – sagte er traurig.
„Pandino, stopp! Zu viele Gedanken. An etwas, was dich nicht wirklich angeht. Außerdem ist es jetzt noch Herbst und du denkst schon an den nächsten. Es war dir doch schon alles früher bekannt, oder? Warum denkst du jetzt darüber nach?“
„Ich dachte, es gab noch viel Zeit bis dahin. Aber der Kalender hat mich erschrocken. Monate mit Licht sind gezählt. Acht ist weniger als zehn…“
„Das ist doch viel Zeit. Außerdem kann sie viel früher die Ukraine verlassen. Es ist doch Krieg und alles kann sich jeden Tag ändern.“
„Dass alles sich jeden Tag ändern kann, ist nicht so fest, wie die Tatsache, dass sie in weniger als einem Jahr ihr Studium beginnen wollte. Alles kann sich ändern, aber alles kann auch so bleiben.“ - sagte Pandino genervt.
„Also du bist wegen eines Ereignisses traurig, das in etwa acht Monaten passiert, richtig? Du trauerst dich darauf sozusagen? Ist es vernünftig? Hast du keine weiteren Gründe, um traurig zu sein?“
„Keine. Sag mal, wenn man erfährt, dass man eine schlimme Krankheit hat und in einem Jahr oder so stirbt, wird man etwa nicht sofort traurig, ohne dieses letzte Lebensjahr fröhlich auf den Tod zu warten?“
„Ja, aber in deinem Fall stirbt niemand, zumindest ist so etwas (noch) nicht gewiss. Zugegeben, es gibt nun mehr Möglichkeiten zu sterben: Raketen, Drohnen, Krankheiten, Autounfälle, wer weiß was noch…“
„Doch, meine Begeisterung und Freude werden sterben. In acht Monaten bin ich kein Pandino mehr.“
„Doch, du warst nie außerordentlich fröhlich. Du wirst auch in 8 Monaten nachdenken können, also bleibt dir die Begeisterung erhalten. Du liebst doch nachzudenken.“
„Ich liebe die schöne Tänzerin. Wer bin ich ohne sie? Sie wäre diese Kerze – er zeigte mit der Pfote auf die Kerze – und ich würde in der totalen Dunkelheit sitzen, wenn sie in ein anderes Zimmer, oder gar Wohnung, oder gar anderes Wohnhaus… eigentlich in ein anderes Land gebracht wird… Ach nein!“ - seine Augen füllten sich mit Tränen.
„So viel Pathos heute! Was hast du am Nachmittag gegessen? Kannst du ihr nicht folgen?“
„Sie braucht mich bestimmt nicht. Und du brauchst mich hier. Zumindest, bis der Krieg zu Ende ist.“ - er wischte sich die Tränen von Wangen ab.
„Na ja, ich möchte, dass du glücklich bist. Ich kann versuchen, ohne dich zu leben. Wir werden telefonieren.“
„Linotschka, du verstehst nicht. Erstens, ist es wichtig, dass ich hier bleibe, weil es hier Krieg ist. Zweitens, bist du für mich wichtig und ich bin für dich wichtig. Mit der schönen Tänzerin verbindet mich nichts, außer meiner Gefühle. Ich kann nicht mein Leben und dich aufgeben, um einem unerfüllbaren und vagen Traum zu folgen. Außerdem wird es keinen Anlass geben, ihr zu folgen. Selbst wenn sie das erlaubt hätte, kann ich doch nicht die ganze Zeit neben ihr sitzen und auf sie gucken. Ich brauche ein Ziel.“
„Du meintest aber eben, dass deine Begeisterung und Freude sterben und dass du kein Pandino mehr wirst, wenn sie weggeht. Du brauchst also nichts aufzugeben, um ihr zu folgen. Sie ist für dich alles.“
„Doch, ich würde dich aufgeben müssen.“
„Siehst du! Also du bleibst nicht mit nichts, wenn sie geht. Du bleibst mit mir.“
„Stimmt. Aber ich werde bestimmt eine Depression kriegen. Worüber werde ich nachdenken, wenn ich ihre Tanzbewegungen nicht mehr sehe und ihr Lachen nicht mehr höre? Dann verliert meine Haupttätigkeit, also das Nachdenken, ihren Kern.“
„Vielleicht könntest du dich in eine andere Tänzerin verlieben?“
„Dein Herz ist aber so trocken! Das hätte ich mir nicht gedacht. Ach, ich spüre schon die Risse, die in acht Monaten die Oberfläche meines Herzens bedecken…“
„Es ist normal, manchmal bricht sich das Herz. Aber Hauptsache es schlägt irgendwie weiter. Nach einer Weile siehst du dann doch eine neue Tänzerin oder eine Sängerin, wer weiß…Und dann hast du wieder das Material zum Nachdenken.“
„Oder ich denke darüber nach, wie ich leide.“
„Es könnte gefährlich werden… Willst du jetzt wirklich mitten im Krieg noch Liebeskummer haben?“
„Wir sind nicht mitten im Krieg. Alles ist hier relativ ruhig.”
“Na ja, wir sitzen in der Dunkelheit. Ok, mit Kerzenlicht. Es ist ziemlich kalt hier… Heute gab es übrigens ein paar Luftalarme. Non ti preoccupi?”
“No. Es gibt Schlimmeres. Du hast recht, ich habe keine Gründe, um zu leiden. Ich kann keine Menschen im Krieg verlieren, weil ich keine Menschen liebe und niemand liebt mich.“
„Das stimmt nicht. Du hast doch eben gesagt, dass du die Tänzerin liebtest!”
“Sie liebt mich nicht, also das zählt nicht. Ich verliere sie sowieso, auf eine oder andere Weise. Ich bin nur ein Zuschauer. Also ich beginne am besten schon jetzt zu leiden.”
“Gibt es hier um uns herum nicht schon genug Leiden?”
“Das ist nicht mein Leiden. Du hast doch gestern selbst gesagt, dass man das Leiden der anderen nicht fühlen kann, auch wenn man mit den Leidenden persönlich spricht.”
“Oh! Du möchtest leiden, weil viele Menschen in der Ukraine leiden, oder? Um dich nicht von anderen zu unterscheiden? Es fühlt sich komisch an, jetzt glücklich zu sein, ne?”
“Ich war in meinem nachdenklichen Leben nicht so oft glücklich. Aber es scheint, Leiden ist jetzt angebrachter als je zuvor. Spürst du es nicht in der Luft? In dieser Dunkelheit?” - fragte Pandino vorwurfsvoll.
“Im Gegenteil. So gehen wir dann unter. Ich spüre schon, dass der Teil meines Körpers, der über dem Wasser bleibt, immer kleiner wird. Tja, es ist schon Zeit, dass der Strom wieder da ist. Merkst du nicht, dass Gedanken immer dunkler werden?” - ich atmete ein Mal laut ein und aus.
“Ja. Gucke auf die Kerze bitte. Das hilft.” - sagte Pandino stolz.
“Und wenn ich die Kerze in ein anderes Zimmer bringe und dich hier lasse?” - fragte ich spöttisch.
“Bitte nicht! Du bist so herzlos!” - rief Pandino.
“Du kannst aber der Kerze folgen…”
“Aber nicht der schönen Tänzerin.”
“Du hast doch mich, Storch und Wildschwein. Du kannst Uns verlieren. Dann gibt es einen realen Grund fürs Leiden. Beeile dich mit dem Leiden nicht. Alles kommt zu seiner Zeit. Na gut, Wildschwein zählt vielleicht nicht wirklich, da seine politischen Ansichten ziemlich zweifelhaft sind, milde ausgedrückt…“
„Ich bin nicht sicher, wie lange wir ihn noch aushalten… Aber er wohnt sowieso nicht in der Ukraine. Das verringert die Wahrscheinlichkeit seines Todes, oder?”
“Ich denke so.”
“Ich kann dich, Linotschka, verlieren, zumal du so unaufmerksam und leichtsinnig bist. Und wegen Storch mache ich mir keine Sorgen: Er kann besser als alle Raketen und Drohnen fliegen. Ihn trifft keine Waffe.“
„Ich bin weder unaufmerksam noch leichtsinnig, aber ja hier in der Ukraine spielen wir alle Lotto mit dem Tod, mit kleineren oder größeren Wahrscheinlichkeit.”
“Linotschka, übertreibe nicht!”
“Ich sage doch, es ist schon zu lange dunkel… Apropos, findest du es nicht schön, dass deine Liebe in acht Monaten in der Sicherheit und im Licht sein wird?“
„Du hast recht – Pandino lächelte plötzlich – es ist wunderschön! Dann muss ich mich nicht um sie bangen. Sie wird auch besser schlafen. Dort, wohin sie geht, gibt es bestimmt keine Luftalarme. Es ist vielleicht auch wärmer und es gibt keine Stromausfälle.“ - er redete wieder wie ein Wasserfall, diesmal aber mit Enthusiasmus.
„Siehst du! Du wolltest, dass sie im Kriegsland lebt, damit du sie sehen kannst. War es nicht egoistisch?“
„Stimmt, es ist viel besser, wenn sie die Ukraine verlässt. Es war mir nicht bewusst. Das wird mich beruhigen, wenn sie in einem sichereren Ort wohnt. Auch wenn ich sie nicht mehr sehen werde, ist der Gedanke so wunderschön, dass sie irgendwo auf der Welt tanzt und lächelt., von nichts und niemanden bedroht.“
Plötzlich wurde in der Flur hell.
„Strom!“ – rief Pandino vor Freude und sprung vom Stuhl zu Boden. – Milch ist hoffentlich nicht schlecht geworden. Der Kühlschrank blieb nur etwa zwei Stunden ohne Strom. Jetzt kann ich auch mich waschen und mein Pelz mit einer Föhne trocknen! Dann wird es mir nach der Dusche nicht so kalt! Ach wie schön!”
„Warte! Und die Kerze? Willst du sie nicht löschen? Wir werden noch viele Kerzen brauchen. Wir müssen doch sparsam sein! Kerzen werden ja irgendwann alle sein!“
„Stimmt, entschuldige. Man muss mit Kerzen genauso sparsam wie mit Elektrogeräten sein. Mit allem sollte man sparsam sein! Wir werden bald so umweltfreundlich leben! Ich werde kein schlechtes Gewissen mehr haben!“ – Pandino löschte die Kerze mit Eifer und wollte schon ins Badezimmer gehen.
„Warte, Pandino! Die Kerze ist also nicht mehr so wichtig oder?“ - fragte ich ernst.
„Es gibt doch Strom! Siehst du nicht?“
„Ich meine deine Liebe.“
„Ja, sie ist wichtig, aber ich muss mich beeilen. Was wenn der Strom wieder ausgeschaltet wird?“
„Du hast recht. Aber denke daran. Kerzen sind schön. Aber wenn es Strom gibt, sind sie nicht lebensnotwendig.“
„Was meinst du?“
„Ich möchte nur sagen, dass dein Leben auch ohne schöne Tänzerin schön ist.“
„Nein“
„Doch“
„Nein“
„Doch“
„Ich möchte mich duschen. Tschüss!“ - er machte die Tür des Badezimmers zu.

1 comentario:

  1. Muy bueno, pero algo más aburrido, le falta acción, para mi gusto, de todas formas gracias Zenia, espero el proximo con curiosodad por ver como queda Pandino y su bailarina

    ResponderEliminar